La controversia en torno a Top Chef VIP ha alcanzado un nuevo punto álgido con las declaraciones de Rosie Rivera, hermana de la fallecida cantante Jenni Rivera. Durante uno de los retos del programa, los participantes debían preparar arepas, un plato típico muy apreciado tanto en Venezuela como en Colombia. Sin embargo, las palabras de Rosie, quien afirmó no saber qué era el choclo y no sentirse cómoda preparando las arepas, desataron una ola de críticas en las redes sociales.

La situación escaló cuando Rosie comparó la situación con los tacos mexicanos, sugiriendo que no le ofendería si alguien desconociera o no apreciara este plato tradicional mexicano. Esta comparación no fue bien recibida por los espectadores, quienes vieron sus comentarios como una falta de respeto hacia las culturas venezolana y colombiana, ambas muy orgullosas de sus arepas.

La reacción de Carmen Villalobos, una de las figuras destacadas del programa, fue de profesionalismo. Villalobos, conocida por su papel en la telenovela “Catalina Santana”, mantuvo una postura firme pero educada frente a los comentarios de Rosie. La actriz colombiana defendió el valor cultural de las arepas y demostró su compromiso con la cocina y el respeto hacia las tradiciones culinarias.

Por su parte, Rosie Rivera trató de aclarar que sus comentarios no iban dirigidos a desestimar las arepas como plato típico, sino a expresar su dificultad personal para preparar un platillo que no conocía ni apreciaba. Sin embargo, el daño ya estaba hecho, y las críticas continuaron llegando, señalando a Rosie como una figura arrogante y poco considerada.

El apoyo a Rosie dentro del programa también se vio afectado. Mientras algunos de sus compañeros de reparto y fanáticos intentaron defenderla, argumentando que sus palabras fueron malinterpretadas, la mayoría de los espectadores no se mostraron dispuestos a perdonarla. La actitud de Rivera fue vista como una oportunidad perdida para aprender y apreciar una parte importante de la cultura latinoamericana.

La respuesta de los usuarios en las redes sociales fue contundente. Muchos pidieron su salida del programa, argumentando que Top Chef VIP es una competencia que celebra la diversidad culinaria y que todos los participantes deben mostrar respeto y entusiasmo por cada reto, independientemente de sus preferencias personales.

En contraste, figuras como el actor venezolano Gabriel Coronel destacaron por su respeto y pasión por la cocina. Coronel, quien también participó en el reto de las arepas, compartió su amor por Venezuela y preparó un plato al que llamó “Venezuela en mi corazón”. Su emotiva presentación fue recibida con elogios tanto del jurado como de la audiencia, consolidándolo como uno de los favoritos en esta edición del programa.

En resumen, el incidente ha puesto en el centro del debate la importancia de la sensibilidad cultural y el respeto en la gastronomía, especialmente en un programa que celebra la diversidad de la cocina latinoamericana.