‘Es malvada’: Mel Gibson FINALMENTE habla sobre la agenda secreta de Oprah – 1

En la era de la cultura de la cancelación, donde un solo tweet imprudente o un desliz verbal puede hundir una carrera, es raro encontrar a una celebridad que no tenga miedo de decir lo que piensa. Mel Gibson, con su historial de controversias, es sin duda uno de esos pocos que se atreve a ir contra la corriente. Y ahora, este franco actor finalmente ha puesto su mira en Oprah Winfrey, una de las figuras más veneradas y poderosas de Hollywood, revelando una agenda secreta que, de ser cierta, podría destrozar la imagen cuidadosamente creada de la querida presentadora de programas de entrevistas. ¿Cuál podría ser este secreto que podría ser tan peligroso para la carrera de Oprah?

A timeline of Mel Gibson's anti-Semitism

Mel Gibson, un actor conocido por su historial de controversias, siempre ha sido una figura franca, incluso en una época en la que las figuras públicas deben ser cautelosas. El auge de la cultura de la cancelación, en la que un solo error o comentario controvertido puede resultar en el rápido declive de una carrera, ha dejado a muchas celebridades reacias a expresar abiertamente sus opiniones. Sin embargo, Gibson sigue siendo uno de los pocos lo suficientemente valientes como para desafiar esta tendencia cultural y hablar abiertamente. Recientemente, ha dirigido su atención hacia una de las figuras más poderosas y queridas de Hollywood: Oprah Winfrey. Según Gibson, Oprah ha estado ocultando una agenda secreta que, si se expone, podría desmantelar la imagen pública cuidadosamente curada que ha construido. Pero, ¿cuál es este supuesto secreto y por qué podría dañar tan drásticamente la carrera de Oprah?

Las revelaciones de Gibson: la presunta implicación de Oprah en el escándalo de Weinstein Uno de los reclamos más impactantes de Gibson involucra la conexión de Oprah Winfrey con el infame escándalo de Harvey Weinstein. Weinstein, un exmagnate de Hollywood, fue el centro de múltiples acusaciones de agresión sexual que salieron a la luz durante el movimiento #MeToo. Gibson sugiere que el silencio de Oprah durante la caída de Weinstein no fue solo ignorancia o un descuido. Afirma que su inacción formaba parte de un plan más calculado para mantener su posición en la élite de Hollywood y proteger a figuras poderosas como Weinstein. Si esto es cierto, sería un gran golpe para la reputación de Oprah, ya que durante mucho tiempo se ha presentado como una defensora de las mujeres y una firme abanderada de la igualdad.

El movimiento #MeToo, que ganó prominencia en 2017 después de que la actriz Alyssa Milano publicara un tuit viral animando a las mujeres a compartir sus experiencias de acoso sexual, cambió para siempre Hollywood. Celebridades de alto perfil, como Gwyneth Paltrow, Ashley Judd y Jennifer Lawrence, contaron historias desgarradoras de abuso a manos de hombres poderosos como Weinstein. El movimiento llevó a una conversación nacional sobre la mala conducta sexual y a que numerosos perpetradores fueran considerados responsables, perdiendo sus trabajos y enfrentando el rechazo público. Entre quienes hablaron con más fuerza estaba Rose McGowan, quien acusó a Weinstein de agredirla en 1997. McGowan se convirtió en una figura clave en el movimiento, hablando no solo contra Weinstein, sino también contra aquellos que guardaron silencio, incluyendo a su propio equipo de gestión y otras élites de Hollywood.

La conexión de Oprah con Weinstein Una de las acusaciones más perjudiciales contra Oprah proviene de su supuesta relación de larga data con Weinstein. Si bien Oprah no ha sido acusada directamente de ninguna mala conducta, los rumores han insinuado que permaneció leal a Weinstein incluso después de que las acusaciones de abuso se hicieran públicas. Gibson afirma que Oprah era consciente del comportamiento depredador de Weinstein, pero optó por mirar hacia otro lado, e incluso podría haber animado a otros actores a trabajar con él. Si Oprah realmente protegió a Weinstein, esto podría alterar drásticamente la percepción pública de ella como una figura moral y defensora de las mujeres.

El cantante Seal fue una de las celebridades que criticaron a Oprah por sus vínculos con Weinstein. En 2018, publicó en Instagram acusando a Oprah de haber sido consciente de las acciones de Weinstein durante años, pero de fingir ignorancia. La publicación de Seal incluía un meme de Oprah y Weinstein con las palabras: “Cuando has sido parte del problema durante décadas, pero de repente todos creen que eres la solución”. Implicaba que el repentino apoyo de Oprah al movimiento #MeToo era hipócrita, dado su anterior cercanía con Weinstein.

Críticas de Rose McGowan Rose McGowan también ha sido vocal en su crítica hacia Oprah. En 2021, McGowan acusó a Oprah de ser “falsa” y de priorizar su influencia y poder sobre el bienestar de las víctimas. McGowan señaló específicamente la decisión de Oprah de retirarse de la producción de un documental que estaba destinado a centrarse en las mujeres que habían acusado al magnate de la música Russell Simmons de agresión sexual. McGowan sugirió que las acciones de Oprah demostraban su verdadera naturaleza como alguien más interesada en preservar su propio poder que en defender a las víctimas de abuso. La denuncia pública de McGowan resonó con muchos, alimentando aún más los rumores de que la integridad moral de Oprah podría no ser tan sólida como parece.

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El escándalo de John of God Además de su presunta implicación en el escándalo de Weinstein, Oprah ha sido criticada por su asociación con el sanador brasileño João Teixeira de Faria, también conocido como “John of God”. Faria saltó a la fama como un curandero espiritual, con muchos, incluida Oprah, afirmando que tenía poderes sobrenaturales. Oprah incluso lo visitó en Brasil y emitió un programa presentando sus supuestas habilidades curativas. Sin embargo, Faria fue más tarde expuesto como un depredador que había abusado sexualmente de cientos de mujeres bajo el pretexto de la curación espiritual. Finalmente fue condenado y sentenciado a más de 100 años de prisión por sus crímenes.

La asociación de Oprah con John of God generó dudas sobre su juicio y los escenarios que brindaba a figuras dudosas. Si bien finalmente expresó su apoyo a las mujeres que habían sido victimizadas por Faria, los críticos argumentan que Oprah ya había causado un daño significativo al promoverlo en primer lugar. Al presentarlo en su programa y darle credibilidad, Oprah contribuyó involuntariamente a su aumento de popularidad, lo que le permitió seguir explotando a mujeres vulnerables.

El escándalo de la escuela sudafricana de Oprah Otro capítulo oscuro en la carrera de Oprah involucra el escándalo en la Academia de Liderazgo para Niñas Oprah Winfrey, una escuela que estableció en Sudáfrica en 2007. La escuela estaba destinada a proporcionar una educación de élite a niñas desfavorecidas, pero pronto se vio envuelta en controversia. En 2007, solo unos meses después de la apertura de la escuela, varios miembros del personal fueron acusados de abusar sexual y físicamente de las estudiantes. Oprah, devastada por las acusaciones, tomó medidas rápidas, despidiendo a los miembros del personal involucrados y abordando públicamente el problema.

A pesar de los esfuerzos de Oprah por resolver la situación, el escándalo dejó una mancha permanente en la reputación de la escuela y planteó preguntas sobre la capacidad de Oprah para supervisar un proyecto tan significativo. Otros problemas continuaron surgiendo, incluidas denuncias de acoso y mala conducta entre las estudiantes, lo que agravó la historia problemática de la escuela.

La doble imagen de Oprah: figura pública versus influencias privadas Lo que Mel Gibson y otros críticos parecen sugerir es que Oprah Winfrey lleva una doble vida: una como la querida y empática presentadora de televisión y otra como una jugadora entre bastidores en las oscuras dinámicas de poder de Hollywood. Esta dualidad, según Gibson, es lo que hace que Oprah sea tan peligrosa. Mientras se presenta como una defensora de la justicia y la igualdad, sus presuntas asociaciones con personas como Weinstein y John of God, así como su implicación en proyectos controvertidos como la escuela sudafricana, cuentan una historia diferente.

Las acusaciones de Gibson, si se prueban ciertas, podrían tener un impacto dañino en el legado de Oprah. Sin embargo, también es posible que estas afirmaciones formen parte de una narrativa más amplia dirigida a derribar a figuras poderosas en Hollywood. Dada la enorme influencia de Oprah y la admiración generalizada que disfruta, es poco probable que estas acusaciones por sí solas destruyan su carrera. Sin embargo, a medida que surgen más historias y acusaciones, la imagen pública cuidadosamente construida de Oprah podría enfrentarse a un escrutinio creciente.