A los 40 años, Jennette McCurdy REVELA el Silencio de Ariana Grande sobre su ABՄSO – 1

Jennette McCurdy Recalls Being 'Jealous' of Ariana Grande

Las recientes revelaciones de Jennette McCurdy sobre su tumultuosa infancia y las experiencias abusivas que vivió en Nickelodeon han captado una gran atención, especialmente tras la publicación de sus memorias I’m Glad My Mom Died (Me alegra que mi mamá haya muerto) y sus afirmaciones de explotación mientras trabajaba en iCarly y Sam & Cat. Uno de los aspectos más controvertidos de esta historia involucra a Ariana Grande, su compañera de reparto en Sam & Cat, quien ha guardado un notable silencio sobre el tema del abuso que ambas supuestamente sufrieron mientras trabajaban en Nickelodeon. Esta falta de respuesta por parte de Grande ha generado preguntas sobre su perspectiva en relación a los problemas que McCurdy ha expuesto valientemente.

Jennette McCurdy se convirtió en un nombre familiar gracias a su papel de Sam Puckett en iCarly, donde su carismática actuación la convirtió en una de las favoritas de los fans. El programa, centrado en dos adolescentes que conducen un programa web, fue un éxito instantáneo y catapultó a McCurdy a la fama. Pero, como ha revelado en sus memorias y en varias entrevistas, el glamoroso exterior ocultaba profundas luchas personales, incluyendo una relación problemática con su madre y experiencias traumáticas en el set.

La relación de McCurdy con su madre, Deborah, fue controladora y emocionalmente abusiva. Su madre la empujó a la actuación desde muy joven, obligándola a asumir roles que no deseaba. Además, su madre contribuyó a sus trastornos alimentarios al controlar de cerca su dieta, manipular sus emociones y controlar casi todos los aspectos de su vida. En sus memorias, McCurdy detalló el costo psicológico que esto tuvo en ella y cómo solo comenzó a sanar después de la muerte de su madre.

Sin embargo, no fue solo en casa donde McCurdy sufrió abusos. En su libro, alega que una figura poderosa en Nickelodeon, a la que se refiere como “El Creador”, la manipuló y explotó, al igual que a otros jóvenes actores. McCurdy recuerda haber sido ofrecida 300,000 dólares en dinero de silencio por parte de la cadena, lo cual rechazó, ya que no quería quedarse callada sobre sus experiencias. Muchos han especulado que “El Creador” es Dan Schneider, el productor detrás de iCarly y otros populares programas de Nickelodeon, quien enfrentó sus propias acusaciones de comportamiento inapropiado antes de separarse de la cadena en 2018.

Ariana Grande, compañera de reparto de McCurdy en Sam & Cat y ahora una superestrella internacional, ha guardado notable silencio sobre los abusos que McCurdy y otros han denunciado. La carrera de Grande floreció después de Nickelodeon, mientras que McCurdy luchaba por encontrar su lugar tras dejar la cadena. La dinámica entre las dos coprotagonistas ha sido objeto de especulación mediática durante años, especialmente en medio de rumores sobre diferencias salariales y tensiones en el set.

Aunque McCurdy ha hablado bien de Grande en el pasado, describiéndola como una amiga cercana, también ha expresado frustración por el trato especial que Grande supuestamente recibió durante su tiempo en Sam & Cat. McCurdy afirmó que a Grande se le permitía seguir con su carrera musical mientras seguía trabajando en el programa, mientras que a McCurdy no se le daban las mismas oportunidades. Estas diferencias percibidas probablemente alimentaron la tensión entre las dos actrices.

Sin embargo, McCurdy se ha abstenido de criticar directamente a Grande por su silencio sobre el abuso que ambas supuestamente vivieron mientras trabajaban en Nickelodeon. Este silencio ha llevado a muchos fans y comentaristas a preguntarse por qué Grande no ha utilizado su plataforma para apoyar a McCurdy o reconocer el ambiente tóxico en la cadena. Algunos creen que Grande podría estar evitando el tema para proteger su imagen y carrera, mientras que otros argumentan que ella también pudo haber enfrentado sus propios desafíos durante su tiempo en Nickelodeon y no está lista para hablar sobre ellos públicamente.

La industria del entretenimiento ha sido criticada durante mucho tiempo por la forma en que trata a los actores infantiles, y la historia de McCurdy es un recordatorio contundente del costo oculto que la fama puede tener en los jóvenes intérpretes. Al igual que McCurdy, muchos otros ex-estrellas infantiles han hablado sobre el abuso emocional y psicológico que sufrieron mientras trabajaban en Hollywood, a menudo a manos de adultos poderosos que se suponía debían protegerlos.

Para McCurdy, el abuso fue doble: la manipulación emocional de su madre, quien usó la carrera de su hija como un medio de control, y el comportamiento inapropiado que experimentó en el set. Su disposición para enfrentar estos problemas de frente en sus memorias ha resonado con muchos lectores, especialmente aquellos que sospechaban desde hace tiempo que el éxito de Nickelodeon fue a costa del bienestar de sus jóvenes estrellas.

El silencio de Ariana Grande, en este contexto, es particularmente notable. Como alguien que compartió el mismo entorno de trabajo y posiblemente fue testigo o vivió un maltrato similar, muchos sienten que tiene la responsabilidad de hablar en apoyo de McCurdy y otros que han dado un paso adelante. La vasta plataforma e influencia de Grande podrían traer aún más atención a los problemas de abuso en la industria del entretenimiento, y su respaldo podría ayudar a validar las experiencias de McCurdy a ojos de aquellos que aún dudan de la magnitud del problema.

Sin embargo, es importante reconocer que el silencio de Grande no necesariamente indica indiferencia. Grande rara vez ha comentado sobre sus experiencias en Nickelodeon, eligiendo en su lugar centrarse en su carrera musical y en su trabajo filantrópico. Es posible que tenga sus propias razones para no abordar las acusaciones, ya sea por temor a represalias, restricciones legales o traumas personales que aún no ha procesado.

Además, no todas las víctimas de abuso o maltrato se sienten cómodas compartiendo su historia, especialmente cuando hacerlo podría tener serias consecuencias profesionales o personales. Puede que Grande no se sienta preparada para confrontar este capítulo de su vida, o puede que sienta que hablar sería demasiado emocionalmente agotador. En cualquier caso, es esencial respetar su decisión, incluso cuando los fans y los medios de comunicación continúen presionando por su respuesta.

La decisión de Jennette McCurdy de compartir sus dolorosas experiencias en sus memorias ha generado importantes conversaciones sobre el trato a las estrellas infantiles en Hollywood y el abuso que a menudo pasa desapercibido. Mientras que muchas ex-estrellas de Nickelodeon han apoyado las afirmaciones de McCurdy, el silencio de Ariana Grande sobre el tema sigue siendo un punto de controversia para algunos. Si Grande hablará alguna vez sobre el abuso sigue siendo incierto, pero lo que está claro es que la valentía de McCurdy al contar su historia ha sacado a la luz el lado más oscuro del entretenimiento infantil y el impacto duradero que puede tener en quienes participan en él.